Double Decker High-Loader, la última propuesta de DHL para catering aéreo

Para que el catering en un avión o un tren se encuentren justo a tiempo y en la cantidad correcta se pone en marcha una sofisticada operación que DHL Supply Chain ofrece en Reino Unido acompañías aéreas y al operador de tren, Virgin Trains. Los diversos negocios de DHL en este segmento fueron presentados a la prensa en los diferentes escenarios de un recorrido en tren desde Manchester a Londres, y el aeropuerto de Londres.

Con Stephen Tennant, Executive Director of Customer Service Virgin Trains, pudimos conocer las ventajas de su colaboración con DHL para tener a punto los servicios a sus clientes. En el aeropuerto, DHL presentó su nuevo concepto de vehículos para el catering en aerolíneas: el Double Decker High-Loader”, una camión con el contenedor sobre una plataforma de tijera que sube hasta el avión.

El diseño del vehículo permite aumentar un 70% su capacidad respecto a los tradicionales sin aumentar las dimensiones totales en la carretera.

Para optimizar la eficiencia a lo largo de la cadena de suministro, DHL se marcó como objetivo aumentar la capacidad del High-Loader pero cumpliendo con la normativa de restricciones a la altura, longitud y anchura. Para ello, trabajó con el especialista Mallaghan Engineering, que realizó un diseño que satisface todos los requisitos mayor capacidad y cumplimiento de las normas, con un techo que se eleva durante la carga y descarga para proporcionar la máxima altura de seguridad de 1,8 m.

Los menores costes de combustible y otras mejoras, lleva a una reducción de los costes operativos del 20%. Paul Richardson, Managing Director Specialist Services, DHL Supply Chain, afirmó: c omo parte de nuestro programa GoGreen estamos comprometidos en ofrecer mejoras medioambientales a nuestros clientes. El Double Decker High-Loader es la última propuesta entre la serie de innovaciones que hemos introducido en los últimos años, como nuestro premiado Rail Kit, que ha desplazado más de 300.000 productos a la semana de la carretera al ferrocarril, con un ahorro de más de 800 TN de CO2 al año.