La industria avanza a pasos agigantados y, después de años viéndola en el horizonte, estamos más cerca que nunca de la fábrica del futuro. La incorporación de tecnologías del mundo IT Information Technologies) en el entorno OT (Operational Technology) ha marcado la diferencia para acelerar el camino hacia la Industria 4.0, basada en una fábrica inteligente y conectada a tiempo real.
La llegada del Internet of Things, IoT, nos lleva sin duda a la cuarta revolución industrial, pero en Schneider Electric preferimos ver el IoT como una evolución natural. Estamos ante un avance que nos situa en un mundo donde nuestros productos y sistemas conectados operan como parte de un engranaje aún mayor. En este entorno, las plantas y las máquinas con inteligencia integrada en su núcleo cooperan para llevarnos a la empresa inteligente, donde se llega al valor tangible mediante mejoras en la eficiencia y la rentabilidad, más ciberseguridad e innovación ygracias también a una mejor gestión de la seguridad, el rendimiento y el impacto medioambiental.
La conectividad y la interacción entre las partes, máquinas y personas hará que nuestras industrias sean 30 veces más rápidas, un 25% más eficientes y llevará hasta un nuevo nivel las posibilidades de customización del producto, según datos de Boston Consulting Group).
El principal cambio es que pasamos de una gestión horizontal a una integración vertical en toda la cadena de valor. Los tres pilares: smart devices, cloud y análisis
Nuestra apuesta por aplicar mundo IT Information Technologies) en el entorno OT (Operational Technology) se basa en tres pilares: dispositivos inteligentes; infraestructura de computación cloud y tecnologías de análisis de esta información.
Los dispositivos inteligentes están en el corazón de la fábrica del futuro. La creación de la infraestructura digital en las plantas de producción se incentivará mediante la introducción de smart devices que permitan aumentar y enriquecer las interacciones entre la máquina y el proceso, incrementando así la capacidad de adaptarse a un entorno industrial que exige cada vez de mayor flexibilidad.
Las plantas y las máquinas con inteligencia integrada en su núcleo cooperan para llevarnos a la empresa inteligente
Un nuevo ecosistema basado en una integración de procesos, máquinas, aplicaciones y personas mejor conectadas.
Schneider Electric ha sido pionera de IoT dado que ya en los años noventa apostó por la conectividad inteligente en entornos industriales mediante el concepto “Transparent Factory”, basado en el uso de servidores Web embebidos en los PLCs para permitir una integración de bajo coste y la posibilidad de visualizar los datos en cualquier navegador. Hoy, casi dos décadas más tarde, seguimos dedicando nuestros esfuerzos en innovar para simplificar los procesos.
La convergencia de sistemas de planificación y líneas de producción, equipos de las fábricas y sus operadores, asegurará que la maquinaria pueda ser un participante autónomo, afectando cada aspecto clave dentro de la planta y en el ecosistema de fabricación.
El segundo pilar es la infraestructura cloud, basada hoy en día en unas tecnologías de la información definidas por software y en vistas de evolucionar hacia una infraestructura física también definida por software. La industria ya dispone de muchos datos de producción y de consumo energético. Con IoT, la tecnología cloud, el Big Data y los sistemas de producción comunicativos, se podrán tratar estos datos en tiempo real, y podremos documentarlos históricamente de manera ordenada, estructurada y sobre todo correlacionada.
Entra aquí el tercer eslabón de la cadena, el análisis. La simulación y la previsión permiten optimizar los procesos productivos y anticiparse ante riesgos o cambios de entorno, gracias a una nueva tecnología que da una potencia de cálculo y un tiempo de respuesta cómodo para tener un buen margen de reacción. El Big Data es un elemento fundamental, dado que las fábricas del futuro dependerán cada vez más del análisis de gran cantidad de información y de una automatización basada en el conocimiento.
Ante una industria cada vez más interconectada y dependiende de las infraestructuras IT, la ciberseguridad es clave para el Internet of Things. Para garantizar la protección de activos, procesos y personas es necesario entender la implementación de un plan de ciberseguridad como un proceso y no como una acción puntual.
La fábrica del futuro está diseñada para progresar y es importante dotar a un actor que se convertirá en un importante motor de cambio de uno de los principales beneficios del IoT: la sostenibilidad. En respuesta a los modelos tradicionales de producción, avanzamos hacia un modelo más sostenible y con elevadas cuotas de productividad, pudiendo leer también el
Internet of Things en clave de eficiencia energética.
El nuevo paradigma digital deja atrás a los actores poco sensibles con su entorno y la eficiencia energética es clave para toda industria que quiera ser competitiva, siendo el IoT un poderoso motor de transformación que permite recortar el consumo de energía en un sector sometido al control de sus públicos de interés, cada vez más exigentes en pro de la sostenibilidad.
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