El e-comercio impulsa el transporte por carretera y aéreo

Los últimos datos ofrecidos por el INE no dejan lugar dudas el sector del transporte de mercancías hará balance de un 2019 con un importante crecimiento de su actividad. Y aunque sigue siendo la carretera, muy beneficiada por el auge del comercio electrónico, en líneas generales todos los modos de transporte, han incrementado su actividad. Si bien, el estancamiento del transporte ferroviario, contrasta con la subida del marítimo y la carga aérea, principalmente por el e-comercio.

El sector del transporte de mercancías, tras un 2018 en el que el crecimiento de la actividad ya fue notable, cerrará el 2019 también con un importante incremento de su actividad. Así, lo indican los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística, INE, donde se refleja que en los primeros nueve meses del año el crecimiento ha sido de un 6,1%.

El dato es aún más importante, si tenemos en cuenta que la subida se ha dado en los diferentes modos de transporte que analiza el Instituto. De hecho, el mayor ascenso se ha producido en el transporte aéreo, con un incremento del 11,7%, seguido por el marítimo que lo hizo un 8,8%.

El sector logístico, por su parte, creció un 6,3%, mientras las actividades postales y de correos lo hicieron un 5,1% y el transporte terrestre un 4,6%. Destacar que las estadísticas del INE dentro del epígrafe de transporte terrestre, se incluye el transporte de mercancías por carretera y servicios de mudanza.

De nuevo, la carretera sigue siendo el modo más utilizado. El 2019, a falta de los datos del último trimestre y ya son cinco seguidos, cerrará en positivo. En el tercer trimestre, según los Observatorios de actividad que publica el Ministerio de Fomento, las toneladas kilómetro producidas aumentaron respecto al mismo trimestre del año anterior, especialmente en transporte local (13’1%), en transporte nacional (6´8%) y en transporte internacional (9´3%). Asimismo, en toneladas transportadas también se observa un incremento de las toneladas transportadas, especialmente en transporte internacional (8´9%) y en transporte local (6’9%).

Un importante incremento, que previsiblemente al cierre del año serán aún superior, ya que debemos tener en cuenta que aún no se computan las mercancías manipuladas durante el Black Friday y la campaña de Navidad. En 2019, si se cumplen las estimaciones realizadas por la patronal UNO, implican que sólo el subsector de la paquetería movió 3,5 millones de envíos el lunes siguiente al Black Friday, un 10% más que en 2018.

En definitiva, nada “parece detener” al transporte por carretera, que sigue creciendo a pesar de que el mercado “arrastra” sus problemas coyunturales de siempre. Así, en el último trimestre, como consecuencia del leve aumento del precio del carburante en el tercer trimestre de 2019 en un 0’3% y un aumento de los costes de personal en un 1’1%, las 20 categorías de vehículos de transporte analizados presentan un aumento de los costes de explotación de los vehículos en el tercer trimestre de 2019 respecto al trimestre anterior.

Un aumento de costes que no será compensado con el de los precios que perciben los transportistas que en el tercer trimestre de 2019, los precios que perciben los transportistas, por kilómetro en carga, aumentaron respecto al trimestre anterior en la mayor parte de los segmentos excepto en media distancia. Así el aumento medio de los precios es del 0’7%, destacando especialmente en transporte de corta distancia (2’2%) y en larga distancia (2’1%) y una pequeña disminución en media distancia (-1’6%).

Aunque la carretera domina el transporte de mercancías, lo cierto es que España es un país, con un potente sector marítimo, una carga aérea en franco crecimiento –este modo también se ha visto muy beneficiado por el auge del comercio electrónico-, y un transporte ferroviario –sin duda, el que menos aporta al PIB y más problemas tiene, pero que también es activo y que espera incrementar sus tráficos según los diferentes corredores ferroviarios estén a pleno funcionamiento.

Si analizamos el comportamiento del transporte marítimo, el conjunto de los 46 puertos de interés general del Estado movieron un total de 428.124.835 toneladas en los nueve primeros meses de 2019, creciendo un 2,2% respecto al periodo anterior, según datos de Puertos de Estado.

Y es que salvo los gráneles sólidos, que descendieron un 8,5% debido al descenso del tráfico de carbón y coque de petróleo, principalmente, el resto de las grandes partidas han experimentado incrementos. Así, los gráneles líquidos crecieron un 5,8%, la mercancía general un 4%, el tráfico ro-ro un 5,8% y el tráfico de contenedores un 4%.

En cuanto al tráfico total, la Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras ha superado los 82,8 millones de toneladas, seguida por la de Valencia con 61,6 millones, Barcelona con 51,9 millones y Bilbao con 26,5 millones de toneladas. El mayor incremento lo experimentaron las Autoridades Portuarias de Málaga (+20,1%), Santander (+14%), Vilagarcía de Arousa (+13,2%) y Bahía de Cádiz (+12,7%).

Las mercancías en tránsito, con 117,9 millones de toneladas y un incremento del 7,6%, representan el 28,2% del total movido por los puertos españoles, concentrándose la mayor parte en los puertos de la Bahía de Algeciras, Valencia, Barcelona y Las Palmas. Igualmente, el tráfico ro-ro, vehículos industriales cargados de mercancías que optan por el barco para evitar ciertas distancias por carretera, continúa creciendo hasta aproximarse a los 50 millones de toneladas.

Sin duda, uno de los datos más positivos en la evolución del transporte de mercancías es el aumento de las mercancías transportadas por avión, un modo que está viviendo un gran momento debido al crecimiento constante del comercio electrónico. En concreto, un mes más, según la información facilitada por AENA, los volúmenes de carga aérea registrados en los aeropuertos españoles subieron durante el mes de noviembre, un 12,1%, tras manipular un total de 103.107.034 kg. De igual modo, el acumulado anual en los diez primeros meses del año incrementa volúmenes, con un ascenso de un 4,8% con relación al período que iba de enero a noviembre de 2018 y un total de 973.183.489 kg.

Por aeropuertos el Adolfo Suárez–Madrid Barajas ha crecido un 13,5% anual en noviembre para un total mensual de 53.241.981 kg de carga aérea, y acumula un ascenso del 7,2% en el acumulado anual, mientras que el aeropuerto de Zaragoza ha manipulado 20.911.484 kg en el último mes, un 27,1% anual más y un 7% más que en los once primeros meses del año pasado.

El aeropuerto de Barcelona con 16.111.642 kg movidos en el último mes, crece su actividad un 6,6%, en relación al mismo período del año anterior, mientras en el acumulado anual asciende un 2,4%. Importante, asimismo, lo acontecido en el aeropuerto de Foronda, por su parte, ocupa la cuarta posición por volumen de carga aérea, con 5.666.863 kg de mercancía mensuales, un 0,3% más que hace un año, mientras que en el acumulado presenta un ascenso de un 2,9% frente al período que va de enero a noviembre del año pasado.

En cuanto a otras instalaciones de la red de aeropuertos públicos españoles, destaca especialmente el crecimiento anual de un 33,3% registrado en los tráficos de carga de Málaga, así como el 41,9% del aeropuerto de Menorca, que, en ambos casos, contrastan con los retrocesos registrados en otros recintos con menores volúmenes.

El optimismo que se aprecia si se analiza el transporte marítimo de mercancías, se convierte en todo lo contrario al evaluar los datos de la actividad del transporte ferroviario de mercancías. Y es que el sector no acaba de salir de su profunda crisis, no lo consigue el gran operador nacional, Renfe Mercancías, pero tampoco logran importantes niveles de actividad los operadores privados.

En concreto, en el tercer trimestre de 2019 se han registrado en total 2.618.826 toneladas kilómetro por ferrocarril, un 1,15% más que hace un año, cuando se totalizaron 2.589.069 toneladas kilómetro. Un dato que no es especialmente bueno si se compara con el segundo trimestre de 2019, cuando se han totalizado 2.742.515 toneladas kilómetro, se ha producido un descenso de un 4,51%.

De ese volumen, 1.542.090 toneladas kilómetro corresponden a Renfe, un 0,24% menos que hace un año, y las restantes 1.076.736 toneladas kilómetro son de los operadores ferroviarios privados, un 3,3% más que entre julio y septiembre del año pasado.

En cuanto a Renfe, según datos ofrecidos por la propia compañía, Renfe Mercancías, continúa descendiendo y cerró los primeros diez meses del año con casi 14,8 millones de toneladas movidas, que implica un descenso del 3,2% respecto al mismo periodo de 2018, cuando se movieron 15,3 millones de toneladas.

El dato de la actividad es tan negativo que el crecimiento del tráfico internacional -creció entre enero y octubre un 22,2%, con 2,8 millones de toneladas transportadas-, no fue suficiente para compensar el descenso protagonizado por el transporte doméstico, que cayó un 7,7%.

Por segmentos, las estadísticas muestran que el tráfico de vagón completo, que concentra casi el 56% de la actividad, acumula un retroceso del 13% hasta octubre, situándose en 8,2 millones de toneladas. Le siguen los tráficos intermodales, que con 5,6 millones de toneladas manipuladas crecieron un 20,6%, y los de ancho métrico, que alcanzaron las 853.000 toneladas, un 21,5% menos.

Bruselas estrena Comisaria de Transportes

El sector del transporte de mercancías, independientemente del modo que se utilice, nunca puede dejar de mirar hacia la política comunitaria de transportes, de cuya legislación depende el funcionamiento interno del sector como actividad y de las empresas, en particular. En ese entorno, el denominado “paquete de Movilidad”, cuya aprobación tiene lugar tras años de retraso, era, es, y probablemente será la Ley más esperada por los transportistas nacionales, que además tienen en el internacional su mayor flujo de trabajo.

Finalmente, casi coincidiendo con el nombramiento de Adina Vâlean como nueva comisaria de Transportes, es algo más que un alivio para el sector. Del paquete de movilidad dependen importantes medidas que, ante todo ayudarán a desterrar la competencia desleal.Pero antes de analizar las novedades incluidas en el paquete de Movilidad, mencionar brevemente las prioridades que se ha marcado Adina Vâlean para su mandato. Entre las prioridades, no podía ser de otro modo, destacan las acciones que lleven a la reducción de emisiones por parte de todos los modos de transporte, no sólo de la carretera.

Para ello, se ha comprometido a desarrollar acciones que lleven a acelerar la transición en el uso de combustibles alternativos, lo que supondrá para el sector un importante paso adelante hacia la sostenibilidad medioambiental. Estas acciones se basarán en incentivos económicos y en la aplicación del principio “quien contamina, paga”, considerando que los usuarios que contaminan deben asumir los costes, incluidos los medioambientales.

En relación a la euroviñeta, al ser el transporte por carretera el responsable del 20% de los gases de efecto invernadero, y el mayor generador de contaminación acústica y del aire, sin contar con los enormes costes que genera por la congestión de carreteras, la Comisaria considera prioritario el establecimiento de “peajes” que lleven a incentivar el cambio de flotas con vehículos más ecológicos que hagan un mejor uso de las infraestructuras.

Paquete de Movilidad

En cuanto al paquete de Movilidad, aprobado el pasado 12 de Diciembre, el texto finalmente aprobado incluye reformas legislativas de vital importancia para el futuro desarrollo de la actividad del transporte por carretera en la Unión Europea, introduciendo importantes cambios en la actividad de las empresas transportistas tanto en España como en el resto de la Unión Europea.

Así, incluye una nueva regulación sobre trabajadores desplazados en el sector del transporte por carretera. En concreto, la regulación del salario mínimo de los conductores en los desplazamientos a otros países europeos se aplicará tanto en transporte internacional como al transporte interior (cabotaje), exigiendo que dichos conductores perciban al menos el salario mínimo establecido en el país o países en que realice el servicio de transporte. Quedan excluidos los transportes internacionales bilaterales, esto es, a los transportes internacionales en los que el país de origen o destino sea donde el vehículo está matriculado.

Otras medidas incluidas en el Paquete de Movilidad son las relativas al mantenimiento de la actual prohibición de realizar el descanso semanal normal (esto es, el de 45 horas cada dos semanas) a bordo del vehículo como así dictaminó el Tribunal de Justicia de la UE, así como la modificación de la actual regulación sobre el cabotaje, estableciendo un periodo máximo de cabotaje continuado de tres días, frente a los siete actuales, pero sin limitar el número de operaciones en dicho periodo.

En este sentido como novedad, tras dicho periodo de tres días, se establece un nuevo periodo de enfriamiento, que finalmente queda establecido en 4 días, durante el cual no se podrá hacer cabotaje en el mismo país donde se ha realizado previamente.

Por último, también, se introducen nuevos requisitos para los vehículos de transporte ligero, que en la actualidad se encuentran prácticamente desregulados. Así, como novedad, a los vehículos ligeros con un tonelaje entre 2’5 y 3’5 toneladas de masa máxima que realicen transporte internacional se les exigirá ir provistos de aparato tacógrafo.